Capitulo 11

Lorena ha hecho sentir demasiado importante a Marc, le ha hecho creer que puede competir con el mismísimo Juan. No sabe que ha sido un error llevarlo a esa cama. Lorena no tiene nada claras sus emociones, duda entre lo que quiere y lo que siente que debe querer. No, definitivamente ningún hombre se puede comparar a Juan ni en belleza ni en artes amatorias. Nunca un hombre la he hecho sentir tan mujer como Juan y menos Marc. Siente añoranza de la pasión, de la locura de Juan que la contagia, pero el recuerdo de lo mal que lo ha pasado a cada una de sus continuas infidelidades la lanzan de nuevo a los brazos de Marc. Lorena sale del paso diciendo:
--por supuesto que contigo es mejor porque estoy enamorada…
Marc tiene la auto-estima muy baja y Lorena se la quiere levantar:
--Nunca he disfrutado en la cama con ningún hombre…
--Lo dices como si hubieras estado con muchos –dice Marc intrigado.
--Eso me pasa por exagerada –dice para sí.
Sin darle detalles le cuenta que su vida amorosa ha estado algo agitada y más en comparación a él, que siempre que lo dejaba con Juan (que han sido varias veces) se refugiaba en otros brazos pero sólo Juan y Nicolás la dejaron marcada.
--¿Nicolás era el novio de tu hermana?
A Lorena no le gusta hablar de su pasado pero no quiere que Marc piensa que le oculta cosas.
--Fue un error pero ya no salían juntos. Me sedujo, me lastimó…
Marc está algo ansioso con respecto al pasado de su chica, quisiera saber más pero Lorena sólo le dice:
--Eres libre para poner punto y final a lo que acaba de nacer.
Lorena ha puesto demasiadas ilusiones en Marc, la habría matado de dejarla pero en seguida él le dice:
--Te quiero por lo que eres y sólo me importa lo que hagas ahora…
Lorena lo abraza feliz y él añade:
--sólo espero ser yo también uno de los que te deje huella.
Lorena apoya su cabeza en el tierno pecho desnudo de él:
--no hará falta porque estoy seguro que tú eres lo que he estado buscando toda mi vida.
A Juan le hace sentir muy halagado las palabras de la chica y el que esté a su lado.
--Me da miedo no estar a la altura y no dejarte suficientemente satisfecha en la cama.
Lorena está segura que Marc la hará feliz en los otros aspectos ajenos al sexo dice:
--me llenas plenamente y soy muy feliz contigo.
Marc siente que ha vuelto a nacer. Lorena le hace sentir atractivo, deseado. Es ya muy tarde, están cansados. Se quedan dormidos el uno en brazos del otro.

Cuando ella despierta, él está ya sentado en la cama. Mirándola entusiasmado.
--buenos días –dice él con una sonrisa.
Lorena lo besa:
--¿qué tal?
La sonrisa de él lo dice todo:
--feliz.
Marc es un hombre nuevo. Lorena lo ve incluso más atractivo.
--es mejor que te vayas a tu cuarto, que pena con los otros si saben que hemos dormido juntos –dice él tímido.
Lorena se le ríe y lo abraza:
--¿es que tú crees qué les va a importar?
Marc se rasca la cabeza tímido.
--Yo estoy muy orgullosa de haber hecho el amor contigo y quiero que todos lo sepan –dice ella.
Marc goza de todas las palabras que le dice Lorena. Se levanta cubierto de la sábana.
--voy a darme una ducha.
Se queda voy avergonzado cuando ve que lo acompaña.
--¿Dónde vas?
Esas son las cosas que más hecha de menos de Juan, su pasión, su manera de arrasar con todo pero está segura que Marc puede aprenderlo.
--Me quiero duchar contigo.
--pero es que yo estoy acostumbrado a ducharme sólo –dice enrojecido de la pena.
Hay cosas en las que Lorena no piensa claudicar y es tratar de vivir el sexo con la misma pasión que con Juan.
--pues te tendrás que acostumbrar.
Marc se siente avergonzado. Se asusta cuando Lorena le empieza a estirar la sábana.
---¡no, no¡ ¡¡no me hagas esto¡ --le suplica él.
Lorena es más fuerte que él y la sábana va cediendo. Él ya teme que Lorena lo deje desnudo en medio del pasillo y lo vean desnudo José María y Susana.
--es que no te he visto desnudo a la luz de día y te quiero ver –dice ella pícara.
Marc está pasando un apuro.
--es que me van a ver los demás y se van a reír de mí…
Lorena no le hace caso y le arranca la sábana del cuerpo. Él se tapa los genitales con las manos aunque con una (y con media) sola le sobra. Lorena no le ha visto su pene en estado de reposo y teme ver las burlas de ella. Lorena se saca la bata que cubre su cuerpo y se muestra desnuda ante él. Le pide con la mirada que él haga lo mismo.
--¿y si nos ven? –apurado.
A traición, Lorena le da un pellizco en la mano y Marc se queja. A soltado sus genitales instintivamente. Enroje mientras Lorena no deja de observarlo. Ella no hace ninguna reacción de estar decepcionada pese a que Marc dista mucho de tener buen cuerpo pero Lorena quiere tenerlo a su lado por su ternura, por su inexperiencia, por la novedad de estar con un chico que no atrae a las mujeres. Entran en el lavabo totalmente desnudos. Lorena lo enjabona y él se deja hacer lo que ella quiera. Lorena logra que Marc la enjabone a ella. Se besan bajo el agua, se van tocando mientras el jabón desliza de sus desnudos cuerpos.



Por las sonrisas de José María y Susana al verlos, Marc y Lorena se dan cuenta que ya saben lo que ha pasado entre ellos. José María abraza a Marc.
--¡felicidades por tu estreno, bandido¡ --le susurra Jose María al oído.
Marc se sonroja. Susana se encierra con Lorena en el baño.
--¡quiero lujos de detalles¡
Mientras los chicos hablan confidencialmente. José María agarra una cerveza de la nevera que comparten entre ambos. Sentados en el sofá. José María le da unas palmadas en el muslo.
--así que ya has probado hembra ¿y qué? ¿Cómo fue?Genial ¿no? –dice José María con cara de pervertido.
A Marc le da pena hablar de esas cosas. Le parece una falta de respecto hacia Lorena.
--¡me lo tienes que contar todo¡ --dice José María.
--de esas cosas no se habla –dice Marc tímido.
José María se muestra muy cariñoso con él:
--¿de qué crees que estarán hablando ahora las chicas? Me voy a enterar igual… Mejor que me lo digas tú… estamos entre machos…
--¡No te voy a contar nada…¡
José María tiene ganas de proteger a Marc como si fuera el hermano mayor aconsejando al pequeño y le hace ilusión compartir con él la experiencia de su primera vez.
--No seas así, encima que te he dado consejos…
--¿Qué quieres saber…? –Marc resignado.
--Fue tu primera vez… ¿fue lo que esperabas? ¿te gustó? –José María pícaro.
--Como quieres que no me guste… --Marc con una sonrisa de pillo.
José María lo felicita, le toca el muslo.

Por su lado, Susana está hablando con Lorena más en serio:
--¿estás segura de lo que haces?
--si claro –pregunta Lorena sorprendida
Susana sabe que Juan es el amor de la vida de Lorena y que diga lo que diga va a acabar volviendo con él pisoteando los sentimientos de Marc si es preciso.
--Marc es muy buen chico, le puedes hacer mucho daño.
--¡te consta que hace días que quería estar con Marc¡ --se defiende Lorena.
--Aún estás saliendo con Juan… --le regaña Susana.
Lorena se muestra auto-defensiva por lo que a Susana le es difícil creer en ese amor que ella tanto defiende:
--¡yo estoy enamorada de Marc y pase lo que pase pienso salir con él. Nunca he pensando en las consecuencias de mis actos y no haré una excepción ahora…
Por el bien de Marc y Lorena, Susana confía, aunque no lo cree, que sean ciertas sus palabras.